Todos sabemos que la tarea de pegar un papel de colgadura se hace mejor y más fácil cuando es en compañía. Y no sólo en lo que se refiere a pegar el papel, sino a la tarea de escogerlo y prepararlo. Para pegarlo nada mejor que varias manos que ayuden, opinen, sostengan y ayuden a llevar a cabo esta dispendiosa y satisfactoria tarea. Para papel de colgadura es un orgullo presentar en esta ocasión su volumen número tres, un espacio dedicado a la cultura visual en Cali, preparado y editado en compañía de la revista Karpa, publicación de la Facultad de Artes y Letras de California State University, Los Angeles, Estados Unidos.
Seguimos firmes en nuestra convicción de facilitar un espacio para comunicar cosas de otra manera y hacerlo en compañía de otras personas, grupos, y redes. Fue así como en agosto del 2008 nos dispusimos a organizar un número distinto, temático y coeditado. ¿Por qué lo visual? Bien dicen varios de los invitados a este volumen que los caleños somos visuales por naturaleza, o que Cali es una ciudad visual donde muchas cosas entran por los ojos: ¡mirá, ve!
Comunicar de una manera distinta se hace no sólo a través de palabras sino a través de las imágenes y sus múltiples expresiones. Como siempre, para papel de colgadura la propuesta gráfica tiene un lugar muy importante. Las fotografías, dibujos, bocetos, grafitis que aquí se presentan hacen parte de lo que para nosotros puede ser un vademécum gráfico de la cultura visual en Cali.
Agradecemos a todas las personas que cedieron sus materiales para enriquecer este volumen. En especial a Diego Pombo, quien permitió utilizar su obra El caballo para la elaboración de la portada; a Luis Ospina, quien cedió el storyboard de Pura sangre, y a quienes nos abrieron sus archivos fotográfi cos personales: Lalo Borja, Miguel González y Pedro Rey.
Queremos agradecer también a todos los que participaron de nuestra convocatoria. Gracias a la amplia acogida que esta tuvo, queremos anunciarles que ya tenemos casi listo nuestro volumen número 4. Recibimos tantos artículos que, literalmente, el papel no dio para publicarlos todos. A aquellos que enviaron sus artículos y ya recibieron la noticia de que serán publicados en el próximo número queremos agradecerles profundamente por animarse a participar y, en este caso, por aguantar con paciencia la espera.